Miles de personas denunciaron en Internet las atrocidades de las que presumían dos menores rusas. Las jóvenes torturaban hasta la muerte animales y luego colgaban en las redes sociales las imágenes.

Las menores llevaban a cabo sus macabros planes en un hospital abandonado en la ciudad de Vladivostok, al oeste de Rusia. Ante la presión de la ciudadanía, la Policía ha intervenido y les ha acabado deteniendo, según informa el medio indiatimes.com.

Después de que se haya hecho pública la detención de las adolescentes, diferentes organizaciones en defensa de los derechos animales han convocado inminentes manifestaciones en señal de repulsa. Piden también que las menores reciban el mayor castigo posible contemplado en la legislación del país.