Más de 650 lobos mueren al año en España. Aunque no se cuenta con un censo, los expertos la consideran una especie amenaza. Sin embargo puede que su descendencia esté a salvo. Desde hace una década Cataluña y Aragón están recibiendo la llegada de una subespecie procedente de Italia: "Vienen de Europa por un corredor natural donde poco a poco buscándose la vida llegan a la península ibérica. Son lobos que intentar intercambiar genes" explica Luis Miguel Domínguez, naturalista.

Pero, ¿Por qué no es nuestro lobo ibérico el que sube y se extiende por el noreste peninsular? "Sería más normal que un lobo de la península ibérica subiese hasta arriba pero no lo hacen porque permanentemente están muriendo lobos en España" asegura Domínguez.

Las administraciones españolas no potencian la expansión del lobo por las presiones de los ganaderos que se quejan de los ataques de este depredador: "Es un asesino en serie. Te mata un montón de animales y se echan a perder porque se comen uno o dos pero 80 u 90 son a los que matan" defiende Jorge Izquierdo, ganadero.

Sin embargo muchas asociaciones conservadoras de la especie e incluso el Parlamento Europeo ratifican que la convivencia con el lobo es posible: "Aprender a manejar el ganado de forma que esa convivencia fuese lo mejor posible. Tener mastines, recoger el ganado por la noche..." explica Theo Oberhuber, coordinador de la campaña Ecologistas en Acción.

Y tienen una única petición para el gobierno: "Que apoyen estas medidas de convivencia que ayuden a los ganaderos" dice Oberhuber. Porque para que esta especie continúe equilibrando el ecosistema el ser humano tiene que estar de su lado.