Rompiendo la tensión superficial con leche, agua y jabón

Para lo cual necesitamos:

- Un tetabrick de leche

- Un plato

- Colorante alimentario

- Bastoncillos de algodón

- Jabón de lavar los platos

Primero ponemos un poco de leche en un plato. A esta leche le vamos a añadir un poco de colorante. Luego cogemos un bastoncillo, lo mojamos en jabón y tocamos la zona donde hay colorante.

Como veis se crean unas corrientes que hacen que los colores se alejen del jabón. Esto ocurre porque en la capa externa de la leche había una fuerza uniforme, que es la tensión superficial.

Esta tensión superficial se rompe por dónde añadimos el jabón porque éste es un “tensoactivo”. Queda entonces sólo la tensión superficial en los bordes del plato, que es la que tira del colorante.

Hay marcas de detergentes que se anuncian como “Detergente con tensioactivos”, pero después de ver esto seguro que alguna pone en el bote “Detergente para hacer dibujos chulos”