Los vecinos de Sarria han utilizado lanchas para luchar por sus árboles. El Ayuntamiento se había comprometido a talar sólo los árboles que estuvieran enfermos y los vecinos explican que no lo han respetado. Además, dicen que el alcalde, José Antonio García, había asegurado que en la renovación de la rivera sólo destruiría la parte reconstruida de un puente del siglo XIX. Pero las máquinas lo han empezado a derribar entero.
La Plataforma se ha intentado oponer y aseguran que el polvo que están haciendo con las obras está matando a los peces. Los vecinos por ahora se respaldan en la ley, afirman que se han saltado las normas que regula la tala de árboles para evitar plagas. Por ello una jueza ha paralizado la tala durante al menos tres días.
El alcalde ha anunciado que ya se ha cedido demasiado. "Si se hubiera hecho la obra como estaba inicialmente hubiera resuelto las inundaciones", ha dicho.
La Plataforma no se rinde y dice que seguirá con la lucha para conseguir que se respete la voluntad de los vecinos.