Alberto López Viejo tiene nuevo apodo, ya no se le conoce como el 'delfín' de Esperanza Aguirre, ahora es Míster 10. Este sobrenombre viene a que López Viejo se llevaba un 10% de comisión en todos los actos de empresa que organizaba su amigo Francisco Correa, el cabecilla de la trama Gürtel.
Medió en la adjudicación de 348 contratos públicos del 2004 al 2007. Para ello se servía de sus cargos como viceconsejero del presidente y después como consejero de Deportes.
Por su parte, el PSOE afirma que ellos ya le denunciaron en su momento. Así lo asegura Maru Menéndez, diputada del PSOE en la Asamblea de Madrid, "el PP persigue a quienes perseguimos la corrupción en lugar de perseguir a los corruptos".
El mismo informe afirma que se desconoce la procedencia de 5,6 millones de su fortuna. Para López Viejo el 10% era sagrado, no importaba si se trataba de un evento solidario que uno institucional. "Todo le servía para lucrarse y malversar fondos de todos los madrileños", aseguran desde el PSOE. Según el informe, en total, las comisiones que se llevó López Viejo desde 2004 a 2007 fueron 290.000 euros, solo en comisiones.
En 2004, por 47 actos, López Viejo cobró un total de 25.541 euros. El exconsejero intervino para que la empresa de Francisco Correa interviniera en los actos y así llevarse su comisión. Por ejemplo, la organización del belén navideño se embolsó casi 400 euros.
En 2005, se llevó comisiones de 149 actos, haciendo un total de más de 91.000 euros. Durante este año triplicó los actos, solo por la puesta de primeras piedras en las construcciones del Ayuntamiento ganó 7.000 euros. Incluso también cobró su comisión a Correa en la ceremonia del primer aniversario del 11-M.
En 2006, por 126 actos ganó 96.923 euros. Un gran año para López viejo y su amigo Correa. Por ello decidió comenzar a cobrar el 10% de la factura y no de los costes, como venía haciendo, haciendo crecer su comisión.
En el año 2007 realizó 26 actos y por ellos se embolsó más de 76.000 euros. A pesar de que ese año se redujeron los actos su comisión siguió aumentando. Sólo por la toma de posesión de Esperanza Aguirre se llevó 28.000 euros.