Si bien el Metro de Madrid es uno de los lugares más frecuentados por carteristas, la red de transportes de Barcelona no se queda atrás.

De la misma forma que en la capital, los ladrones actúan intentando desviar al descuido la atención de una posible víctima para quitarle sus objetos personales.

Por ejemplo, un un carterista alerta a determinadas personas de que se les ha caído algo al suelo mientras sacan su billete en las máquinas expendedoras. En ese momento, y por el otro lado, actúa su compinche robando las tarjetas de crédito con la que las personas estaban pagando.

Sea cual sea el método, la forma más clásica de robar en el metro es cuando éste se encuentra lleno de gente. Las aglomeraciones fuera y dentro del vagón son de lo más tentador para los carteristas, así como los turistas, que suelen llevar encima más dinero.

Sin embargo, es posible que por un tiempo en Barcelona se sintieran más protegidos. En los últimos años se ha conseguido reducir en casi un 90% el número de robos en la ciudad condal.

El éxito de esta tarea corresponde a la seriedad para realizar el trabajo que implementa los agentes de seguridad. Vigilan con suma atención cualquier comportamiento extraño que pueda indicar un intento de robo.

También las posibles víctimas de un robo deben agradecer la labor de personas como Eliana Guerrero. Ella es conocida por alertar, con su silbato, cualquier intento de robo que pueda cometerse en el suburbano.

Tal es su eficacia que, en una ocasión, consiguió detener a unos ladrones gracias a la ayuda de unas 20 personas que les acorralaron hsata que vino la policía.

Así, en los últimos años se ha conseguido reducir el número de robos en el metro de la ciudad condal. Sin embargo, es necesario ir siempre muy atento para evitar cualquier intento de robo