Vamos a mirarnos en otros espejos, en otras formas de estado. La primera, la de un país vecino, una monarquía sin rey, la Francia republicana. François Musseau, corresponsal de ‘Liberation’ en España, cuenta que “lo que ha conseguido en Francia la república es poner de acuerdo a la nación, a la gente, al pueblo francés sobre el modelo de los valores”.

“Nadie se plantea que acabemos con la república, ni la extrema derecha ni la extrema izquierda se plantea que cambiemos de régimen. Si en Francia se ataca al jefe de Estado, se debilita la función presidencial, pero no tanto la república.”“En España se debilita al jefe de Estado y es mucho más lo que se debilita además del jefe de Estado, se debilita el régimen monárquico”.

Francia elige a su jefe de Estado cada cinco años, eso, según Musseau, “le da más legitimidad, los franceses saben que en el momento en el que ellos no quieren más de él, como pasó con Sarkozy, le echan”. ¿Cómo ven los franceses las monarquías como la española? Musseau afirma que “lo ven como un poco folclórico, pero también saben muy bien que tiene mucho que ver con la figura de Juan Carlos, entonces saben que esto es frágil”.

Si Francia es un modelo republicano, la corona británica lo es en cuanto a su monarquía, con un gran apoyo social. Tom Burridge, corresponsal de la ‘BBC’ en España, nos cuenta que la familia real británica es parte de su identidad, es decir, que si eres muy británico es que apoyas mucho a la familia real.

“Creo que los británicos sí que se dan cuenta de que es algo positivo para nuestra imagen fuera”, afirma Burridge. “No hay ningún partido político que cuestione la monarquía. Para cualquier partido, eso sería un gran error, los partidos nunca van muy en contra de la opinión pública”. “Lo que han hecho bien en los años recientes es que se han modernizado, cualquier institución en cualquier parte del mundo tiene que cambiar, y si no cambian se enfrentan a dificultades”.