Aznar ha vuelto y lo ha hecho con la misma arrogancia de la que hacía gala cuando era presidente. El martes concedió una entrevista a Antena 3 conducida por Gloria Lomana. Wyoming no valora el contenido pero sí la puesta en escena: “muy oscura para alguien que en la boda de su hija consume 32.000 euros en luces. Él vino a iluminarnos y a cambio deberíamos ser capaces de iluminarle ¡que le pongan un traje de luces!”.

La entrevista no contenía muchos mensajes ocultos. De hecho, la mayoría de ellos son bastante claros. Se trata de durísimos ataques lanzados contra gobierno de Mariano Rajoy. Para el expresidente son muchos los puntos en los que se equivocan Rajoy. El primero y más importante de todos: no tener proyecto político.

Entró en política autonómica. Más concretamente en la polémica del déficit a la carta para Cataluña. Aznar habla de un horizonte de esperanza donde se refiere a sí mismo. Después de criticar la labor de Rajoy empezó a hacer lo que mejor se le da: hablar bien de él.

El gran tema de la noche eran las informaciones publicadas en ‘El País’ que aseguraban que Correa habría pagado parte de la boda de la hija de Aznar. Él se defendió atacando al grupo Prisa. Para el expresidente Correa sólo es alguien que tiene unos problemas con la justicia. En cuanto a Blesa, se desató en elogios con él.

La parte que más interés desató fue la dedicada a los papeles de Bárcenas, los supuestos sobresueldos y la supuesta financiación ilegal de PP. Aznar lo negó con un “rotundamente no”. “Aznar sólo cobró dos retribuciones: una por él y otra por su ego”, comenta Wyoming.

Cuando habla de sus gastos es más explícito. Alardea que pagaba una renta por vivir en La Moncloa. Lo que no cuenta es que el PP pagó hasta que llegó a La Moncloa su vivienda en Madrid. Para finalizar, Aznar no negó el volver a la política.