A pesar del robo, y gracias a la solidaridad de los vecinos, este martes vuelve a repartirse comida caliente en el comedor social que llevan ocho jubilados de Argés, en Toledo.

Mientras la Guardia Civil sigue investigando el robo de 300 Kilos de comida, en el comedor aseguran que con todo lo que han recibido tienen para una semana.

Tras conocer el desfalco, que dejó estas cámaras frigoríficas y estanterías vacías de comida, todos en el pueblo se han volcado para ayudar.