Un toro alvero de 400 kilos se escapó en febrero de una granja de Tiana, en Barcelona, con cinco vacas. A finales de mayo lograron capturarlo. Llevaba tres meses campando a sus anchas por los bosques de Montornès del Vallès.
"El toro se escapó el 2 de febrero. Una persona hizo un movimiento equivocado, hubo una pequeña estampida y se escapó", explica Francesc Giró, dueño del toro.
Pero tan solo cuatro día después, volvió a escaparse al monte, y ya lleva allí seis meses. "Lo hemos vuelto a intentar capturar dos veces más y no hay manera. En junio dos captura sin éxito", cuenta Juan Garcia, del servicio de Protección Civil Montornès.
Los vecinos de la zona se queja de que les está detrozando los campos de cereales y viñedos para alimentarse. Además de vaciarles los abrebaderos, ya que un astado de 400 kilos y bebe 15 litros diarios.
En septiembre arrancará la temporada de caza mayo, y un todo suelto es un peligro tanto para los perros como para los dueños. "Se juntan una jauría de perros a su alrededor y el toro no va a estarse quieto", advierte Antonio Jiménez, cazador de Montornès del Vallès.
Protección civil ya no sabe que hacer, y urge al dueño del toro, al Ayuntamiento y a la Generalitat para que pongan los medios para capturar al toro esquivo.