Los Mossos aún no hay conseguido dar con él. Sigue el dispositivo para localizar al hombre que el miércoles disparó dos veces contra un trabajador de un salón de juegos en Santa Coloma de Gramanet, en Barcelona.  El sospechoso tiene unos 30 años y mide en torno al metro ochenta.

Uno de los disparos fue en la cabeza y a muy corta distancia. A pesar de ello, ha sobrevivido, y se encuentra en el hospital estable pero fuera de peligro.

El arma está en posesión de los investigadores y señalana que pudo ser el factor clave por el que la víctima no ha fallecido, ya que es sorprendente que haya conseguido sobrevivir disparándole desde tan cerca.

El arma, a simple vista de gran tamaño, podría haber sido manipulada para disparar munición de pequeño calibre y algunos expertos apuntan a que podría tratarse de un arma detonadora.