Rakú, un perro que estaba suelto por el Campo San Francisco de Oviedo, se enfrenta a 1.500 euros de sanción por buscar una pelota con la que jugaba con su dueño en un macizo de flores el pasado mes de febrero. Dos agentes de la Policía Local han realizado una propuesta de multa hacia su dueño basándose en un artículo de la ordenanza de Convivencia Ciudadana.

Esta normativa señala la prohibición de circulación “por las vías públicas de aquellos animales que no vayan acompañados de personas con capacidad para manejarlos, o que los vigile provistos de collar y conducidos mediante correa o cadenas”. Los agentes acusan a Rakú de causar daños en el macizo de flores, pero según su dueño, Rakú sólo estaba buscando la pelota con la que jugaban a última hora de la tarde.

Por ello, al hombre le ha llegado una notificación con el nombramiento del instructor del expediente por "falta grave", según recoge ‘El Comercio’. El periódico, además, informa que las posibilidades del propietario prácticamente se limitan a aceptar el pliego de cargos y abonar una sanción reducida de entre 750 y 1500 euros.