Avanzan las investigaciones relacionadas con el descarrilamiento del tren Alvia en Santiago. El juez ha pedido a la Policía que busque entre los restos del tren el teléfono y el iPad del maquinista donde se encontraba la hoja de ruta de Garzón. Además el magistrado ha citado a declarar a todas las personas, vecinos y policías, que auxiliaron a Francisco José Garzón tras el accidente.

Además, se ha celebrado la primera reunión de la comisión de expertos creada por Fomento para mejorar y reforzar la seguridad de la red ferroviaria. En seis meses, esta comisión compuesta por prestigiosos profesionales del sector deberá tener listo un informe con recomendaciones y medidas a adoptar para que no se repita una tragedia como la de Santiago. La Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios ya envió la semana pasada una recomendación a Fomento para la implantación progresiva de balizas ASFA que frenen los trenes en caso de superar la velocidad máxima permitida.

Desde los sindidatos de maquinistas, tienen claro los aspectos que se deberían abordar."Se debería analizar profundamente las condiciones en las que se encontraban las instalaciones y qué faltaba en ese trayecto que hubiera podido evitar el accidente", ha declarado Juan Jesús García, secretario general del sindicato de maquinistas.

Precisamente, Adif ha instalado dos kilómetros y medio antes de la curva donde tuvo lugar el accidente, un sistema de seguridad ASFA digital que frenará de forma automática cualquier tren que circule a más de 60 kilómetros por hora. Se trata de una baliza bloqueadora idéntica a las que se instalan en las entradas de todas las estaciones.

Justo antes de la curva de A Grandeira, los responsables de mantenimiento de la vía también han colocado una nueva señal que limita el paso a 30 kilómetros por hora. Se trata de un cartelón provisional que limitará la velocidad hasta que se restablezcan las condiciones idóneas de la vía. "Si no hubiera ocurrido ningún accidente seguro que no nos estaríamos planteando ningún eje de mejora", ha comentado Raúl Herrero, experto en el sector ferroviario.

Y mientras la investigación continúa. La policía científica trata ahora de localizar el ipad y el móvil personal del maquinista para comprobar si pudieron influir en su despiste. Asimismo, se ha conocido que el interventor negó hasta en tres ocasiones a la Policía Científica haber hablado por teléfono con él.