Miguel Ángel Flores trata de eludir toda responsabilidad en la tragedia del Madrid Arena culpando al Ayuntamiento de Madrid y a su alcaldesa, Ana Botella.
"Ellos a mí me imponen todo: quién es la empresa de limpieza que tengo que contratar y yo le pago a Madridec, quién es la empresa de seguridad, y yo le pago a madridec. Son ellos los que imponen todo, y por lo tanto tienen que asumir responsabilidad", explica Flores en una entrevista al diario El Mundo.
Y entre esas responsabilidades, dice, la de controlar el aforo del recinto. "La obligación es de la empresa de seguridad: Seguriber. Una empresa de seguridad como seguriber tiene que prevenir cualquier riesgo, que aquellas personas que no tienen autorización o una entrada para entrar al evento, no entren", añade el empresario.
Flores defiende además su experiencia como empresario. Y asegura que muchas de las pruebas han sido manipuladas: desde las entradas depositadas en las urnas hasta los vídeos de las cámaras de seguridad.
Por todo esto, un año después de la tragedia, el promotor de la fiesta dice que no va a asumir responsabilidades que no le corresponden. "Yo voy a asumir la responsabilidad que salga de este procedimiento, pero no voy a asumir la de los demás. Siento muchísimo la muerte de estas niñas pero considero que no soy el único responsable", reitera Flores.
De momento hay 24 imputados, y las diligencias del caso acumulan casi 9.500 folios. Está previsto que la instrucción concluya el próximo diciembre, un año y un mes después de la fatídica noche que acabó con la vida de Rocío, Cristina, Belén, Katia y Maria Teresa. Sus familias y amigos, aún hoy, se estremecen cada vez que oyen las palabras 'Madrid Arena'.
Por eso, han pedido al Ayuntamiento que cambie el nombre del recinto. La alcaldesa estudia la propuesta para que el nombre del pabellón rinda homenaje a las víctimas.