Según han informado este domingo fuentes del Centro de Coordinación de Emergencias, el siniestro se dio por controlado anoche y en el lugar ha permanecido un retén para evitar posible rebrotes.

De las 78 hectáreas de superficie arrasada por el fuego, 62,8 hectáreas corresponden al término de Pedralba, 11,4 hectáreas al de Vilamarxant y 3,6 hectáreas al de Benaguacil. Las 70 familias desalojadas de la zona de Benaguacil han pasado la noche en casa, aunque siguen manteniéndose alerta.

El fuego, que inicialmente presentaba cuatro focos, se originó sobre las 13.30 horas del sábado junto al salto de la central eléctrica de Benaguacil, en las inmediaciones del río Turia.

Aunque todavía no se ha podido determinar la causa del incendio y se ha abierto una investigación, las mismas fuentes han indicado que podría haber sido intencionado.

Para extinguir el incendio fueron utilizados 16 medios aéreos, 12 brigadas forestales y 8 autobombas que han trabajado sin descanso para salvar el bosque.

También respiran más tranquilos es en Almorox, Toledo. En tan sólo cinco días han sufrido cuatro incendios. El último, del sábado por la tarde, pudo controlarse gracias a la labor de 127 personas y 37 medios.