Un tribunal de Dublín ha ordenado a una familia irlandesa pagar una compensación de casi 10.000 euros a una niñera española que denunció la explotación que sufren algunas trabajadoras de este sector en la República de Irlanda.

La decisión adoptada por la Comisión de Relaciones Laborales, sin precedentes en Irlanda, ayudará a que las au pair dejen de ser "explotadas" y consideradas como "mano de obra barata", destacó través de su abogado la joven, quien ha preferido mantener su anonimato.

La WRC compensó a la niñera con 9.229 euros tras demostrarse que la citada familia, cuya identidad tampoco ha sido divulgada, infringió la Ley de Salario Mínimo, de Organización del Horario Laboral y Condiciones de Empleo (2000) al pagarle solo 100 euros semanales. Desde el uno de enero de 2016 el salario mínimo en Irlanda está fijado en los 9,15 euros a la hora.

La niñera explicó en una nota difundida por el CRCI que se sintió "agotada, deprimida y débil" cuando decidió meses atrás buscar ayuda para denunciar su situación laboral. "Ha sido un proceso largo y mucha gente ha trabajado en mi caso. Por fin he recibido la recompensa y el respecto que necesitaba.

El Centro de Derechos de los Inmigrantes aseguró que la sentencia judicial "envía un claro mensaje" a las familias que emplean niñeras, al tiempo que advirtió de que, "por desgracia", este no es "un caso aislado". "Sabemos que muchas au pairs reciben un trato mucho, mucho peor", declaran desde el Centro. Su trabajo es esencial para las familias, la comunidad y la economía.

El pasado año, el CRCI publicó un informe en el que aseguraba que ahora presta apoyo legal a unas 1.000 niñeras, desde los 40 casos que tuvo en 2012. El 37 % de las 554 niñeras encuestadas no tenía contratos y un 40 % tenía solo uno verbal, mientras que al 58 % se le pagaba 120 euros semanales o menos. El 48 % de las niñeras era de nacionalidad brasileña y el 28 % española.