Este curso han ingresado en los seminarios españoles 311 nuevos seminaristas distribuidos entre las 70 diócesis españolas. Aumenta así el número de aspirantes al sacerdocio y se consolida la tendencia al alza que comenzó en el curso 2011-2012 con 277 nuevos seminaristas, mantenida también en el 2012-2013, con 295 nuevas incorporaciones, y en el 2013-2014, con 299.

En cifras absolutas, actualmente hay 1.357 seminaristas, la cifra más alta desde el curso 2011-2012 en que había, 1.278. En el curso 2012-2013 el número de seminaristas fue de 1.307, y en el de 2013-2014 ascendió a 1.321.

El cardenal arzobispo de Barcelona, Lluis Martínez Sistach, se ha dirigido a sus feligreses para decirles: "Me complace haceros partícipes de esta buena noticia, esta alegría" tras comunicarles que durante este curso han entrado en el Seminario Mayor de su archidiócesis 11 jóvenes aspirantes.

Sin embargo, el cardenal de Barcelona ha pedido prudencia ante este "avivamiento" en el número de incorporaciones al considerar que esperar que continúe este aumento de las cifras sería "prematuro". "Tenemos que ver si esta tendencia se mantiene en los próximos años. No podemos lanzar las campanas al vuelo, pero sí que es cierto que estas cifras son motivo de esperanza", ha razonado Sistach en la glosa semanal que dedicó el recientemente celebrado Día del Seminario.

El arzobispo de Urgell, Joan Enric Vives, por su parte, ha remarcado la importancia de la oración, sin la cual no se darían "vocaciones, formación ni discernimiento evangélico". El obispo de Girona, Francesc Pardo, ha añadido su convicción acerca del ministerio ordenado, un factor "fundamental en la Iglesia". "Se puede hablar de las formas, condiciones, requisitos del ministerio o servicio presbiteral, pero hace falta disponer de los capellanes necesarios para ejercer la misión que les toca en el Pueblo de Dios", ha escrito monseñor Pardo en su carta del Día del Seminario.

Pese a este aumento de vocaciones, la Iglesia todavía percibe la recesión vivida durante los años anteriores a 2011, ya que durante este 2014-2015 sólo ha habido en España 117 ordenaciones sacerdotales, 14 menos que en 2013-2014, según los mismos datos.