Un grupo de desconocidos han quemado en Bizkaia ocho autobuses de la empresa de transporte público Bizkaibus, en un sabotaje provocado, ya que han aparecido en el lugar una garrafa de gasolina, restos de un petardo usado para provocar el fuego y pasquines del preso de ETA Ibón Iparagirre.

Siete autobuses han quedado completamente calcinados y otro parcialmente quemado. Los bomberos han tenido que trabajar hasta la madrugada para extinguir las llamas. El fuego no ha dejado heridos, ya que los autobuses estaban vacíos.

El Gobierno Vasco ya ha expresado su "condena enérgica" al acto. Sortu también ha expresado su rechazo a la quema en una escueta nota. "Este ataque se enmarca fuera de la estrategia de la izquierda abertzale y sólo beneficia a aquellos que pretenden perpetuar el conflicto".