En su escrito de conclusiones provisionales, el fiscal Carlos Bautista relata que los hechos se produjeron con ocasión de la celebración de una manifestación independentista no comunicada a la autoridad gubernativa correspondiente, convocada por los colectivos Arran, COS (Coordinadora Obrera Sindical) y CUP (Candidatura Unidad Popular) por las calles de Mataró.
A ella asistieron unas 200 personas y al llegar a la altura del local del colectivo Arran, conocido como 'EL Teler', los acusados se separaron del grueso de la manifestación y mediante un sistema de poleas colgaron una imagen del rey Juan Carlos en la fachada.
Posteriormente, Guifre Peguera roció la imagen con un líquido inflamable, mientras que el otro acusado, Jordi Nogue, se encargó de prenderle fuego, lo que provocó que el retrato se carbonizara rápidamente, "aplaudiendo la acción el resto de los concentrados".
El fiscal califica estos hechos de un delito de injurias a la corona y pide imponer a cada acusado una multa de doce meses a razón de 30 euros de cuota diaria, lo que supone un total de unos 10.800 euros.
La vista oral se celebrará ante el juez central de lo Penal de la Audiencia Nacional, José María Vázquez Honrubia, que en julio de 2008 condenó al pago de una multa de 2.700 euros a los jóvenes independentistas catalanes Jaume Roura y Enric Stern por quemar una foto de los Reyes en Girona el 13 de septiembre de 2007.