La Generalitat Valenciana elimina los privilegios de las residencias vinculadas al presidente de las Cortes, Juan Cotino, y del empresario alicantino Enrique Ortiz. Según el diario 'El Mundo', el objetivo es hacer un reparto más equitativo de las 4.000 plazas de residencias que ofrece la Administración valenciana.

Una decisión que llega dos meses después de que salieran a la luz unas conversaciones entre el sobrino del dirigente del PP, Vicente Cotino y Enrique Ortiz. En ellas pactan una presión a Joaquín Martínez, secretario autonómico de la Conselleria de Bienestar.

"Hay que presionar a Joaquín Martínez. El conseller tiene todo el interés del mundo en llenar nuestras residencias, pero Joaquín Martínez se está tocando los cojones", le dice el empresario a Vicente Cotino en una llamada telefónica.

Para Ortiz, Joaquín Martínez sólo era un obstáculo al que había que convencer, por eso tenía un método de presión muy bien estudiado. "Hay que presionarle, presionarle todo el día. Yo incluso llamaré por teléfono y le voy a mandar gente que le pegue toques", insiste Enrique Ortiz. La Fiscalía Anticorrupción ha abierto diligencias de investigación para esclarecer todas las irregularidades que envuelven el 'caso Rabasa'.