El Valle de los Caídos se queda, de momento, como está. El PSOE se había quejado porque, a pesar de que la Ley de Memoria Histórica obliga a convertirlo en lugar de recuerdo de las víctimas de dos bandos, el ejecutivo del PP ha dedicado casi 300.000 euros a restaurarlo sin adaptarlo también a las víctimas republicanas de la guerra. El Gobierno se justifica diciendo que cambiar ahora el Valle de los Caídos reabre innecesariamente las heridas. 

El Valle los caídos seguirá tal y como lo conocemos, y significando exactamente los mismo. El Gobierno desoye definitivamente las recomendaciones que un comité de expertos puso encima de la mesa hace ya dos años, trasladar los restos mortales de Franco y dar otro significado al monumento.

Pero eso sería reabrir heridas innecesarias, según el Ejecutivo del Partido Popular, que en respuesta parlamentaria al grupo socialista argumenta la falta de consenso para dejarlo todo tal y como está. Algo que para las asociaciones por la memoria.

Según algunos historiadores, llegaron a trabajar 20.000 presos republicanos en el mausoleo que Franco erigió para inmortalizar su victoria. 

Al respecto, el senador del PNV, Iñaki Anasagasti, llegó a proponer una idea más drástica, se mostró a favor de volarlo. Sin embargo, su idea le costó una querella que hace unos días acabó archivando el Supremo.