Duelo de banderas a la puerta del Parlament. A un lado, centenares de catalanes ávidos de independencia. Todos allí con un único objetivo: apoyar al parlament. Un apoyo que han demostrado vitoreando a los diputados que han salido a la calle a saludar.

Al otro lado, los unionistas. Un grupo mucho más reducido, pero al menos igual de ardoroso. Al grito de "Viva España", los partidarios de la unidad de España han abucheado a Artur Mas a la salida del pleno.

Ha habido pequeños roces sin consecuencias a cuenta de la televisón autonómica catalana y algún cruce de reproches. Alguno, incluso, ha denunciado insultos de la otra parte. "Me estaban llamando facha y me estaban diciendo que me fuera de Cataluña", ha explicado una manifestante en favor de la unidad de España.

Pero, en general, el respeto ha imperado durante toda la mañana en los exteriores del Parlament. Y, entre medias de los dos bandos, también quienes renuncian al choque y prefieren los procesos constituyentes individuales.