Entre enero y junio se registró un saldo migratorio negativo de 50.426 personas, que fue suavizado en parte por el crecimiento vegetativo positivo de 2.280 personas (diferencia entre 208.791 nacimientos y 206.511 defunciones) y que hizo que la población española se redujese en 48.146 personas.
Así, a fecha 1 de julio, la población española se sitúa en 46.464.053 habitantes, lo que refleja el continuo descenso poblacional iniciado en 2012. Según estos datos, el saldo migratorio de 50.426 personas (salidas menos entradas) fue un 54% inferior al del semestre anterior.
De las 156.066 personas que optaron por establecerse en España (un 2% más que en el semestre anterior) 17.951 son españoles y 138.115 extranjeros, mientras que la emigración cayó un 21,4%. El primer semestre de este año también ha reflejado una moderación en la salida de inmigrantes de España que ha caído un 71,7 % respecto a los seis meses anteriores.
Por nacionalidades, el mayor número de personas que llega a España procede de Rumanía (16.323 entre enero y junio), Marruecos (11.680), Italia (7.592) y Reino Unido (7.336). Y entre los que abandonaron España también destacan los rumanos (25.890), los marroquíes (19.151), los ecuatorianos (7.896) y los bolivianos (7.564). La edad de los extranjeros que salieron se concentró en la población de entre 20 y 39 años, en su mayoría barones.
Según Estadística, el descenso experimentado por la población española en los seis primeros meses ha sido del 0,28% en comparación con el mismo periodo del año anterior, cuando la caída fue del 0,46%, lo que indica una moderación en el ritmo anual de pérdida de población.
El INE también ha difundido los datos definitivos de 2013, un año en el que la población decreció en 215.691 personas y en el que destaca el crecimiento de la población de nacionalidad española 179.929 habitantes debido al proceso de adquisición de nacionalidad española al que optaron 225.793 personas.
Entre enero y junio se ha producido un fenómeno similar ya que, pese a que la población residente se ha reducido en 48.146 personas, las de nacionalidad española se ha incrementado en 90.410 habitantes.
Esto se debe de nuevo, según ha explicado el INE, a que entre enero y junio 132.990 personas adquirieron la nacionalidad española ya que, descontando este efecto, y contabilizando sólo a quienes han nacido en España, la población se redujo en 17.407 personas.
La población extranjera se redujo en 138.556 personas, un 3% hasta los 4,53 millones debido al efecto combinado de la emigración y de la adquisición de nacionalidad española. Por nacionalidades y en términos absolutos, destaca el aumento de la población italiana con 3.356 ciudadanos más, seguida, muy de lejos, por la francesa con 547 más.
Por el contrario, los principales descensos registrados entre enero y junio los han protagonizado los ecuatorianos cuya población residente en España se ha reducido en 27.014 personas, seguida de la marroquí, con un descenso de 20.917 y de la colombiana con 18.873 personas menos.
En términos relativos, entre las principales nacionalidades sólo aumentan la italiana (1,9%) y la francesa (0,6%), mientras que los principales descensos poblacionales fueron los de los peruanos (14,8%), bolivianos (14%) y ecuatorianos (12,6%).
Por comunidades autónomas, entre enero y junio la población se redujo en trece de las diecisiete encabezadas por el Principado de Asturias y Castilla y León, con un descenso en ambas del 0,43%, y seguidas por Castilla-La Mancha (0,39%), y La Rioja (0,37%). Por el contrario, sólo aumentó en Baleares (0,53%), Canarias (0,27%), Murcia (0,14%) y Andalucía (0,04%).