No son segundos, pero los de Podemos, satisfechos, presumen de haber abierto una brecha definitiva en el bipartidismo. Su fuerte han sido las alianzas territoriales, que les han dado la victoria en el País Vasco y en Cataluña. Iglesias ha dicho que son "la única fuerza estatal capaz de liderar un acuerdo que respete la plurinacionalidad".
Además son segundos en lugares como la comunidad valenciana o Galicia, donde concluyen: la unión hace la fuerza. El contraste, el pobre resultado en Andalucía, donde no han conseguido plantar cara al bipartidismo.
Pese a todo, con más de cinco millones de votos, Iglesias apunta alto, y aunque habla de humildad y diálogo, también plantea imposibles líneas rojas de cara a un hipotético acuerdo, como la celebración del referéndum catalán o la reforma constitucional sin dejar de lado la lucha social.
Sin que sirva de precedente, Iglesias también ha parafraseado a Felipe González: "Nos ha faltado una semana y un debate". Les ha faltado tiempo, dice, pero este caballo emprende una nueva andadura al galope.