En la jornada de reflexión hay tantas opciones como candidatos. Cristina Cifuentes se ha subido a la bici, con mayor o menor destreza, y no ha comenzado el día con muy buen pie ya que "se me ha roto la pila de la cocina" ha afirmado ante los periodistas, mala suerte contagiosa, ya que más tarde se ha encontrado con un ciclista caído que no le ha venido del todo mal ya que le ha asegurado "tienes mi voto".

Su rival en las urnas ha tenido un día más relajado. Hasta el aeropuerto se ha ido Ángel Gabilondo, a recoger a su hijo que vive en Suecia para presumir, como padre orgulloso, y de paso, arañar un voto. No es su hijo, pero casi.

Pecas ha acompañado a su dueña Esperanza Aguirre mientras ésta ha repasando los periódicos. Y al mismo tiempo, Antonio Miguel Carmona sacaba el boli rojo para ver si susclases han dado sus frutos, y de paso, tratar de convencer a algún pupilo indeciso.

Sudando la camiseta extraoficial y a lo Rambo, pareciéndose a Ronaldinho, ha jugado un partido de fútbol Pablo Iglesias, con gol incluido. Veremos si la buena racha en el campo les acompaña también en las urnas. Cospedal ha preferido reservar fuerzas y en Barcelona, imagen atípica, porque la reflexión, al menos por la mañana, la han compartido juntos casi todos los candidatos han salido al balcón del ayuntamiento a partir del lunes, solo uno de ellos podrá asomarse como alcalde.