Bruselas da un tirón de orejas al Gobierno español. Y lo hace porque considera que la retirada de la tarjeta sanitaria a los desempleados que residan fuera de España más de tres meses vulnera la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea: “Toda persona tiene derecho a la prevención y atención sanitaria” dice la carta.
“Porque no van a tener esa cobertura sanitaria a partir del tercer mes, se entiende que se está cercenando el derecho a libre circulación de estos trabajadores que tienen que salir en busca de trabajo” desvela Diego Fernández, de DDHH Abogados.
La normativa se escuda en que si una persona pasa más de 90 días en otro país, debería registrarse allí como residente. Pero la Comisión europea recuerda que: “Una persona puede ausentarse durante un periodo igual o superior a 90 días sin necesidad de cambiar de residencia”.
Porque con una tasa de desempleo juvenil de más del 56%, son muchos los jóvenes que hacen la maleta y se marchan fuera. Como Isabel que trabaja como aupair en Brighton pero no tiene contrato. Así que no tiene cobertura sanitaria aquí ni allí.
Un limbo sanitario en el que se encuentran muchos jóvenes. Si Bruselas echa para atrás esta polémica normativa, España podría enfrentarse a una importante sanción económica.