El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha cerrado el caso abierto tras la muerte del cámara de televisión José Couso durante la Guerra de Irak en 2003 y ha desimputado a los tres militares de Estados Unidos que seguían procesados. La reforma de la Justicia Universal aprobada por el Gobierno del Partido Popular y el precedente del caso Tíbet, según Pedraz, dejan sin efecto las órdenes de detención internacional contra los tres militares norteamericanos.