''Entre los caídos había profesores... hombres y mujeres que se empeñaron en hacer realidad los sueños de estos niños'', recordaba Obama, emocionado, en su comparecencia.

El presidente ha reabierto el debate sobre la tenencia de armas en EEUU. ''Como país hemos pasado por esto demasiadas veces'', ha dicho el presidente, que ha llamado a la unión, ''más allá del color político'', para que no se repita un episodio así.

Desde 1999, fecha de la masacre del Columbine High School, que acabó con la vida de 13 personas, se han vivido 31 matanzas en EEUU, el doble que en el resto del mundo. Una de las tragedias, la de Virginia, dejó 35 muertos en una universidad.

El debate sobre las armas es un tema tabú en EEUU. En el año 2000 un 66% de los estadounidenses quería controlar las armas, un porcentaje que ahora, 12 años después, se ha reducido al 47%.

Aunque el debate se reabre con cada una de estas masacres, al llegar al Congreso, la mayoría impediría acabar con este derecho del que los republicanos son fieles defensores.