El Ejército israelí ha pedido a unos 100.000 palestinos del norte de Gaza y de dos barrios de la capital de la Franja que abandonen sus casas "por su propia seguridad" ante la posibilidad de nuevos bombardeos en la zona. Las zonas en las que se han distribuido estos mensajes, tanto por SMS, llamadas telefónicas y en las últimas horas panfletos, han sido Beit Lahia, en el norte del territorio palestino, y en los barrios de Shayaía y Zeitún, en Gaza capital.

Según los medios locales, cerca de 80.000 palestinos han desoído las advertencias de Israel y han permanecido en sus hogares. "Por tu propia seguridad se te solicita que evacúes tu residencia inmediatamente y marches hacia la ciudad de Gaza en la mañana de este miércoles, 16 de julio de 2014 a las 8:00 AM", reza una de los panfletos distribuidos por el Ejército.

La noche del pasado sábado, miles de octavillas ya fueron lanzadas desde aparatos de la aviación israelí a la población de la zona norte sobre un inminente bombardeo contra objetivos relacionados con Hamás y el lanzamiento de cohetes. Cerca de 18.000 palestinos abandonaron sus hogares en Beit Lahia tras esos avisos, 4.000 de los cuales buscaron asilo en escuelas de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos, que vieron sus instalaciones desbordadas.

A diferencia de otros conflictos bélicos en la región, como en Siria o Irak, la población civil no involucrada en el conflicto armado en Gaza no tiene la posibilidad de abandonar por completo las zonas de combate o acudir a lugares seguros y habilitados para desplazados o refugiados. Ello se debe a que el enclave mediterráneo tiene sus dos únicas salidas al mundo, por Israel y Egipto, bloqueadas y limitadas exclusivamente a casos humanitarios.