Estados Unidos y el propio Donald Trump han reaccionado con sorpresa al último gesto de Melania Trump, que ha vuelto a desairar en público al actual líder de Estados Unidos. Las cámaras han captado el momento en que la primera dama estadounidense ha apartado su mano de la de su marido al término del debate.

Con un tono respetuoso, y sin el polémico cara a cara del primer debate, los candidatos, Donald Trump y Joe Biden, sí han podido enfrentar ideas esta vez. Pero el magnate sigue sin perder su particular tono: "No podemos mantener este país cerrado. La gente está perdiendo sus trabajos. Se está suicidando".

Tampoco Biden desaprovecha la situación para golpear a su rival: "La persona responsable de tantas muertes no puede seguir siendo presidente de EEUU". La imagen que protagonizaron Melania Trump y su marido al término del encuentro no fue la única que llamó la atención a los seguidores del debate.

La cara de Joe Biden lo decía todo cuando Trump expresó sin miramientos que en Estados Unidos están "aprendiendo a convivir con el virus" y que no tienen elección: "No podemos encerrarnos en un sótano, como hace Joe". Por ello, no ha dudado en responder al actual líder norteamericano: "¡La gente está aprendiendo a morir del virus!".

El candidato demócrata tampoco puede esconder su reacción de sorpresa al oír a Trump afirmar que ha "asumido la responsabilidad" de la gestión de la pandemia de coronavirus en el país. En esta línea, el líder republicano, que se mostró más comedido en este debate, optó de igual manera por soltar varias perlas durante el encuentro.

"Da igual quién esté en el público, yo soy el menos racista de esta sala", se aventuró a decir, si bien tampoco se aguantó las ganas de hablar sobre su política migratoria, incluida la separación de familias migrantes en las fronteras estadounidenses: "Están muy bien cuidados, están en instalaciones que están muy limpias". Así ha transcurrido un debate en el que los dos se han acusado de corrupción y ha habido medias verdades y mentiras directas.