Michael Adebowale, de 22 años, y un segundo hombre identificado como Michael Adebolajo, de 28 años, mataron al soldado a machetazos frente a un cuartel militar de Woolwich, en un acto calificado por el Gobierno británico de terrorista.
En el ataque, ocurrido a primera hora de la tarde, Adebowale y Adebolajo, británicos de origen nigeriano convertidos al Islam, resultaron heridos cuando las fuerzas del orden les dispararon.
Un video de Adebolajo pronunciando en 2009 un discurso radical ante 1.500 islamistas ha abierto un debate en Reino Unido, ya que el extremista era considerado por los servicios secretos como un radical de bajo riesgo, lo cual ha generado criticas, como ya pasó con los atentados de Boston.
Ambos fueron trasladados con diversas heridas a un hospital de Londres, donde Adebolajo aún permanece ingresado.
La Fiscalía británica ha informado de que autorizó a la Policía a presentar también cargos contra Adebowale por posesión de un arma y resaltó que hay suficientes pruebas para procesarle.
La Policía informó que, según la autopsia practicada al soldado británico, éste murió a causa de "múltiples heridas".
El asesinato del militar, padre de un hijo, conmocionó al Reino Unido, que pudo ver a uno de los sospechosos filmado por una cámara instantes después de atacar a Rigby con las manos ensangrentadas y empuñando un machete.