Los planes del Banco Central Europeo (BCE) para ampliar las compras de deuda pública y animar la economía del Viejo Continente han impulsado hoy a la bolsa española, que ha ganado el 2,05 por ciento, la mayor subida en quince días, y ha vuelto a conseguir ganancias en el cómputo anual.

Mientras la prima de riesgo bajaba a 112 puntos básicos (nivel que no registraba desde mayo pasado), el principal indicador del mercado nacional, el IBEX 35, subió 207,90 puntos, el 2,05 %, hasta 10.365,40 puntos.

Respecto al comienzo del ejercicio vuelve a conseguir ganancias, el 0,84 por ciento. En Europa, con el euro en 1,113 dólares, Fráncfort ha ganado el 2,48 por ciento; el índice Euro Stoxx 50, el 2,47 por ciento; París, el 2,28 por ciento; Milán ha subido el 2 por ciento, y Londres, el 0,44 por ciento.

La bolsa española ha conseguido terminar la sesión con ganancias después de que el Banco Central Europeo (BCE) indicara que en diciembre podría ampliar en cantidad o tiempo el programa de compra de deuda soberana para estimular la economía y detener la caída de los precios.

Después de una mañana y un comienzo de tarde marcados por la quietud, la bolsa española despegaba a las dos y media de la tarde cuando el presidente del BCE, Mario Draghi, señalaba que en diciembre volverían a alimentar al mercado.

Hasta entonces, la bolsa española rondó sobre los niveles de cierre del miércoles al esperar las palabras de la autoridad monetaria, que provocaron que el euro bajara a 1,125 dólares, nivel de dos semanas atrás, lo que también ayudó a la bolsa.

Los resultados empresariales y económicos apenas causaban impacto en el mercado hasta que se oyeron las palabras del BCE, excepto en algún caso, como las cuentas de Orange, que impulsaban la cotización de Telefónica.

De las estadísticas económicas destacaron el alza de las ventas minoristas en el Reino Unido en septiembre, la balanza comercial en Italia y España, país en el que descendió la tasa de paro en el tercer trimestre 1,2 puntos, hasta el 21,18 por ciento (casi 300.000 parados menos, hasta 4,85 millones).

Las intenciones del BCE y la posterior subida de Wall Street (al cierre española avanzaba cerca del 1,5 por ciento), impulsaban al mercado nacional hasta 10.400 puntos, cota que no podía superar al cierre. El mercado neoyorquino había ignorado el empeoramiento de los indicadores adelantados estadounidenses y se aprovechó del crecimiento del 4,7 por ciento de las ventas de viviendas de segunda mano.

Todos los grandes valores subieron: Telefónica, el 5,25 por ciento, la mayor subida del IBEX, con Banco Santander en segundo lugar en la lista de ganancias de este indicador y un alza del 3,23 por ciento, e Inditex en tercero y una subida del 3,13 por ciento, en tanto que Repsol ganó el 3,01 por ciento; BBVA, el 2,24 por ciento e Iberdrola el 1,03 por ciento.

Solo diez compañías del IBEX concluyeron con pérdidas: Abengoa B perdió el 3,55 por ciento; Bankinter, el 3,27 por ciento, después de presentar unos resultados que no han convencido a los inversores, en tanto que OHL cedió el 3,04 por ciento.