Rechazo absoluto y generalizado a la última propuesta de la Comisión Europea de la reducción salarial del 10%. Ni el Gobierno, ni los sindicatos, ni la CEOE piensan tomarlo en consideración.

"Aqui cada uno tiene que opinar de los suyo y Olli Rehn debería opinar de la situación europea y que se hagan bien las cosas en Europa", contesta Martínez Pujalte, diputado del Partido Popular.

En el PSOE, la califica de venenosa. "Sus recetas no son buenas para al economía española, han resultado ser veneno", critica Rubalcaba.

CCOO y UGT han rechazado la propuesta de la Comisión Europea y del FMI de bajar los salarios, porque agravaría la situación económica y empobrecería a los ciudadanos.

Ambos sindicatos han reaccionado así ante las declaraciones del vicepresidente económico de la Comisión Europea, Olli Rehn, quien ha defendido los recortes salariales de hasta el 10% propuesto para España por el Fondo Monetario Internacional -FMI- y pidió a los sindicatos y a la patronal un gran acuerdo para ello como fórmula para combatir el paro.

El director de Comunicación de CCOO, Fernando Lezcano, ha expresado el "absoluto rechazo" de este sindicato a la propuesta porque considera que desde que empezó la crisis las políticas que se han llevado a cabo han ido "en la dirección de la devaluación interna", por tanto, la depresión de las condiciones de trabajo y particularmente de las salariales.

"Eso no sólo se ha demostrado ineficaz para salir de la crisis sino que nos ha instalado en una prolongación de la misma", ha subrayado Lezcano.

Además, cree que supone una dificultad añadida para las personas que ya tienen actualmente salarios de "subsistencia".

La medida es "de todo punto inaceptable", tanto por su incapacidad para contribuir a la salida de la crisis, como por el sufrimiento que causa a las personas, ha señalado.

A su juicio, la política económica llevada a cabo para combatir la crisis ha sido ineficaz y ha subrayado que CCOO es partidario de estimular la actividad económica a y para ello se requiere que salarios de trabajadores en activo y de los pensionistas que "estimulen el consumo".

Por su parte, el secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, en un comunicado, ha dicho que la medida es "descabellada" porque rebajar aún más los salarios de los ciudadanos condenaría a España "a la miseria".

Ha manifestado que las políticas "neoliberales" que se vienen "imponiendo" a España han fracasado y ha subrayado que el Gobierno española ha seguido "al dictado" de Europa la reforma laboral y ahora hay más de 600.000 ocupados menos de los que había antes de su aprobación.

Ferrer ha señalado que los salarios reales en España, una vez descontada la inflación, han caído 6,3 puntos desde 2010, algo que, subraya, no ha tenido "ningún efecto en el empleo" y por el contrario ha llevado a una caída del consumo y la inversión, además del sufrimiento a las familias.

El dirigente de UGT ha recordado, que los empresarios están incumpliendo lo que pactaron en el II acuerdo para el empleo y la negociación colectiva porque mientras sus beneficios suben un 2,2 % las rentas de los trabajadores han disminuido el 5,4 % en 2012.

Además, ha recalcado que a esta reducción salarial hay que sumar la destrucción de empleo y el aumento de impuestos y precios de productos y servicios básicos como alimentos, carburantes, energía y también sanidad y educación.

Para Ferrer, este tipo de medidas sólo consiguen crear !más paro, más pobreza y mayor desigualdad".