Se acerca el final del año y se acentúa una obsesión: "Corregir el déficit público es una prioridad".
Hacer bueno el objetivo de déficit es la prioridad del Gobierno que busca soluciones para alcanzar la cifra mágica. "Estamos convencidos de que el déficit público se irá acercando cada vez más al 6,5%".
Como cada diciembre Montoro hace malabarismos, esta vez en pos de ese 6,5%, si el año pasado se retrasaron las devoluciones del impuesto de la renta y Bruselas dio un tirón de orejas, en 2013 se ha optado por suprimir pagos al sector eléctrico. "Hay una prioridad sobre todas las demás que es la contención del déficit público".
Posponer el pago de 3.600 millones de euros a las eléctricas podría repercutir en la factura aunque el Gobierno lo niega. "El Gobierno no va a permitir que se produzca semejante subida de la electricidad, eso se ha planteado que se pague en 15 años".
Y solucionado ese frente, el siguiente retraso se producirá en el plan de proveedores. Hacienda pospone pagos por valor de 8.000 millones y los más afectados serán los grandes proveedores del sistema sanitario, que no cobrarán hasta febrero.
Con estas medidas de maquillaje, Hacienda dispondría de unos 11.600 millones de euros extra de oxígeno para cuadrar el déficit de 2013. Otra historia a la luz de estos retrasos será alcanzar el objetivo de 2014 pero eso ya se verá en diciembre del año que viene.
Buen rumbo
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