Los vecinos de Puerto de Santa María no quieren ni oir la palabra privatización. Su agua, aseguran, no se vende. Una veintena de vecinos llevan cuatro días encerrados de forma indefinida en el Ayuntamiento.

Piden a su alcalde, Alfonso Candón, que cuenten con la opinión del pueblo o que retire la propuesta de privatización. Denuncian que el Gobierno municipal sólo quiere hacer caja con este servicio, ya que con la venta del 49% de la empresa municipal de agua no saldarían la deuda del municipio, 160 millones de euros.

Los vecinos cuentan además con el apoyo de 7.000 firmas para reivindicar que el agua es un derecho básico y público.