La empresa Citröen en Vigo siempre ha sido un motor económico en la comarca. Muchas industrias dependían de ella, pero ahora, con la crisis económica, los propietarios han decidido buscar otros mercados.

Laureano Pérez dirige una empresa que ha pasado de elaborar contenedores y trenes logísticos para las cadenas de montaje de coches a diseñar pistas de padel. Con la crisis, han optado por renovarse y apoyarse en el perfil que ya tenían sus trabajadores. "Hemos aprovechado toda la plantilla, como personal de oficina de desarrollo e ingenieros", ha declarado. 

Jesús González, presidente de la Unión de Empresas Gallegas Aeronáutica, ha cambiado los coches por los aviones. Lidera un grupo de empresas que tenían su negocio en la construcción de maquinaria para la fabricación de coches pero ahora han volcado sus esfuerzos en la aeronáutica. González ha comentado: "Hemos buscado nuevos nichos de negocio sin hacer grandes inversiones para entrar en los grandes paquetes de empresas aeronáuticas".

Xan Rey es otro ejemplo de la búsqueda de nuevas áreas de negocio. En su empresa fabrican cualquier diseño en chapa, pero la automoción ya no hace tantos encargos. Quería afrontar nuevos retos sin tener que asumir mucha inversión por lo que ahora se dedica al mobiliario urbano.

La industria del motor les ha dado la espalda, pero su salto a otros sectores garantiza su progreso.