El Indice de Precios de Consumo (IPC) bajó en julio un 0,5% respecto a junio y recortó tres décimas su tasa interanual, hasta el 1,8%, debido a que la subida de los precios de los medicamentos y la electricidad fueron inferiores a las registradas un año antes, según ha informado este martes el Instituto Nacional de Estadística (INE), que confirma así parte de los datos avanzados a finales del mes pasado.
Con el retroceso de julio, el IPC interanual vuelve a bajar después de haber encadenado dos meses consecutivos de ascensos y se sitúa de nuevo por debajo de la barrera del 2%.
El Gobierno espera que el IPC se contenga durante este ejercicio, hasta el punto de que podría cerrar el año por debajo del 1%, según ha asegurado el ministro de Economía, Luis de Guindos, que ha destacado que esto permitiría ganar poder adquisitivo a los pensionistas.
Según ha destacado Estadística, en tasa mensual (julio sobre junio), los precios registraron durante el séptimo mes del año un descenso del 0,5%, tras encadenar cinco meses consecutivas al alza, tras la subida del 0,1% que experimentaron en junio.
Por su parte, el Indice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) se situó en julio en el 1,9% en tasa interanual, tres décimas por debajo del dato de junio, mientras que la inflación subyacente, que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos no elaborados, disminuyó tres décimas, hasta el 1,7%.
Según ha explicado el INE, los medicamentos han sido uno de los grupos que más influencia han tenido en el retroceso del IPC interanual, con una tasa del 3,7%, casi diez puntos inferior a la del mes de junio, debido, principalmente, a que la subida de los precios en este grupo ha sido menor este mes que la registrada el año pasado.
De hecho, hace un año, la entrada en vigor del copago farmacéutico elevó los medicamentos y el material terapéutico un 20,3% en tasa mensual.
Otro grupo que ha destacado por su repercusión en la inflación interanual ha sido la vivienda, cuya variación disminuyó más de un punto, hasta el -0,7%, a causa del menor incremento de los precios de la electricidad respecto a 2012. También influyó el mantenimiento de los precios del gas frente a la subida registrada en julio del pasado año.