La Comunidad Valenciana es una de las regiones más castigadas por el veto ruso, las pérdidas alcanzan los 70 millones de eruros. La Comisión Europea no ha incluido a sus agricultores en la lista de compensaciones, y ellos las reclaman. Mientras el precio de la fruta se desploma hasta un 15%. El veto se alargará hasta 2016 como ya ha anunciado Putin.