Pocos días después, la policía logró detener a los dos ladrones gracias a la descripción del propietario de la vivienda, que además de dar detalles básicos como la ropa que llevaban puesta o el color, hizo especial hincapié en el enorme parecido de uno de ellos con el jugador estrella del Real Madrid.

Tras ser detenidos, los ladrones negaron los hechos pero, poco tiempo después, acabaron confesando que sí fueron ellos los que rompieron la ventana para intentar entrar en la casa, pero que su objetivo no era realizar ningún hurto, ya que solamente buscaban un lugar donde refugiarse y poder dormir.

El abogado de la defensa, con un gran sentido del humor, dijo ante el juez que "podría requerir la asistencia del señor Cristiano Ronaldo, porque creo que mi cliente no se parece a él".