El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha llamado a los representantes de su partido a responder al "desafío separatista" y las posibles cesiones de Pedro Sánchez ante el independentismo catalán desde todos los "rincones". De las ciudades a los parlamentos autonómicos, las Cortes y, también, la Justicia.
"Llevaremos a cada una de las instituciones una iniciativa en favor de la igualdad de los españoles. No se puede defender la igualdad y a la vez defender los privilegios de políticos independentistas concretos", ha anunciado ante la Junta Directiva Nacional de su partido.
Y en este contexto, Feijóo parece que rebaja ya sus expectativas para conseguir una investidura para la que todavía no ha conseguido los apoyos necesarios. Ante su equipo, ha dicho que prefiere poder "mirar a los ojos" a sus votantes desde la oposición a "bajar la cabeza para entrar en la Moncloa". Este último, explica, es el camino "fácil de elegir", pero no cree que sea de recibo.
Así, ha reiterado que elige pagar el precio de un no a su investidura para defender este "gobierno de rigor", a un sí a un gobierno de "desigualdad". "Por los resultados electorales que dieron la victoria al PP, nos corresponde liderar la sesión de investidura que va a tener lugar la última semana de septiembre. Se ha iniciado el camino que nos llevará a gobernar España ahora o pronto", ha seguido Feijóo ante los suyos. "Nos han votado para defender los valores constitucionales, para que las familias puedan llegar a fin de mes, para que se garanticen los servicios públicos y las pensiones", ha insistido.
Ofensiva contra el "desafío separatista"
Por otro lado, la respuesta al "desafío separatista", dice Feijóo, "no es ni puede ser un mero enfrentamiento dialéctico entre Génova y Ferraz, la responsabilidad de responder es colectiva y la tendrán que asumir todos los órganos democráticos".
A los suyos les ha propuesto "usar todos los instrumentos democráticos que las urnas" han puesto a su alcance: "La fuerza de ser el primer grupo en el Congreso, la mayoría absoluta en el Senado, los gobiernos autonómicos, municipales, y diputaciones y también, si hace falta, la vía judicial".
El líder del PP argumenta que los españoles no han dado su "consentimiento" a que España deje de ser una nación de "ciudadanos libres e iguales", y por tanto a la amnistía o autodeterminación que pide el independentismo.
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"Los españoles no vamos a consentir los despropósitos que parece que vamos a vivir en las próximas semanas. Los españoles merecen saber qué dicen sus representantes en todos los rincones de España", ha sentenciado.
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