El huso horario es cada una de las franjas geográficas, orientadas de norte a sur, en las que hemos dividido la Tierra y que tienen una amplitud de 15 grados, que es el ángulo que rota el planeta en una hora. Los husos horarios se construyen sumando o restando números enteros al Tiempo Universal Coordinado (UTC) que es el mantenido por los relojes atómicos. Así, en España la hora oficial es UTC+1 (en invierno es UTC+1 y en verano es UTC+2).

Una zona horaria es una región que comparte la misma hora oficial. Las zonas horarias no siempre se ajustan al huso horario geográfico, sino que cada país ha adaptado sus costumbres a sus horas, generalmente más ajustadas al sol que a la hora que marca el reloj. Por ejemplo, en Italia se come a las 13:00 y en España a las 14:00, los informativos de televisión en Italia se emiten a las 20:00 y en España a las 21:00. Cambia la hora del reloj a la que hacemos las cosas, pero con respecto al punto solar en España e Italia comemos y vemos los informativos en el mismo momento del día. Con esto quiero decir que el número que marca el reloj y la actividad que por costumbre hacemos cada hora es un convencionalismo de cada país o cultura, y que en realidad vivimos más de acuerdo con el punto solar que con el número que marca el reloj.

Ahora mismo hay dos debates abiertos en torno a esto. Uno se refiere al huso horario:¿Debería España cambiar el huso horario oficial? Unos abogan por establecer el huso horario UTC+0 (como Reino Unido y Portugal, que están a una hora menos), otros por establecer el UTC+2 (que coincidiría con el horario actual de verano) y otros por dejarlo como está, UTC+1. Este debate es bastante estéril, ya que acabaríamos viviendo de acuerdo con el sol, solo que cambiaríamos el nombre que le damos a cada hora. Por ejemplo, si cambiamos a UCT+0, si ahora un día de invierno el sol se pone a las 19:00, con el nuevo huso horario el sol se pondría a las 18:00. De este modo, un comercio que antes cerraba la persiana a las 19:00 cuando empezaba la puesta de sol, con el nuevo huso horario cerraría el comercio cuando es totalmente de noche. Algunos alegan que en ese caso los comercios deberían adelantar una hora sus horarios de apertura y cierre, de manera que los trabajadores pudiesen salir con la puesta se sol y no cuando ya es totalmente de noche. Esto significa que seguiríamos viviendo exactamente igual que ahora con respecto a la posición del sol, solo que le daríamos a las horas un nombre diferente. Si atrasas el reloj pero tu vida se adelanta una hora, el resultado es cero; sigues haciendo lo mismo pero con un número diferente marcado en el reloj. Con lo cual, para la comunidad científica este debate está resuelto: cambiar de huso horario en España no serviría para nada.

El otro debate se refiere al cambio de hora estacional: ¿En España deberíamos tener horario de verano y horario de invierno? Este pasado fin de semana retrasamos los relojes una hora para adaptarnos al horario de invierno UTC+1. Cuando llegue el verano haremos el cambio contrario, adelantar el reloj, de modo que regresaríamos al UTC+2. Este cambio de horario está relacionado con la inclinación del eje de rotación de la Tierra, que es el que provoca que en España el momento de salida y puesta del sol se mueva 3 horas cada 6 meses, y que pasemos de 15,5 horas de sol en verano a solo 9 horas de sol de invierno.

Este baile de horas se debe a los 23,5° de inclinación del eje de rotación de la Tierra con respecto al que marca la traslación alrededor del Sol. A finales de junio el polo norte estará 23,5° inclinado hacia el Sol y, a finales de diciembre, inclinado lo mismo hacia el lado contrario. En total la Tierra cambia de inclinación 47° cada 6 meses, que es muchísimo. Esa es la razón por la que cambiamos la hora dos veces al año, para compensar las oscilaciones de los puntos solares e intentar que la salida del sol y la puesta de sol ocurra a una hora lo más parecida posible a lo largo de todo el año. Es la forma que tenemos de ajustar la hora del reloj a la idea de levantarnos con el sol.

Imaginando que se suprime el cambio de hora estacional, ¿con que hora nos quedamos, con la de verano (UTC+2) o con la de invierno (UTC+1)? Si se aplicara el horario de invierno todo el año, durante cuatro meses al año en Cataluña amanecería antes de las 6:00 de la mañana. Si se aplicara el horario de verano, que es lo que prefieren la mayoría de los españoles según las encuestas, en Galicia amanecería sobre las 10:00 durante cuatro meses al año. El cambio de hora estacional viene a minimizar esos desfases horarios con respecto a los puntos solares.

Cambiamos de hora con las estaciones porque tenemos estaciones en las que la posición del sol varía 3 horas cada 6 meses. Sin embargo, en otros lugares sí es lógico que se suprima el cambio de hora estacional, como por ejemplo en Finlandia, que a principios del invierno tienen noche las 24 horas del día y a principios de verano tienen día las 24 horas del día. Es lógico que a los finlandeses el cambio de hora estacional les dé igual y prefieran suprimirlo. Sin embargo, en España no da igual, y esto además lo sabemos porque nuestros vecinos de Portugal llevan más de un siglo experimentando con diferentes posibilidades horarias, entre ellas eliminar el cambio de hora estacional. Para los portugueses la eliminación del cambio de hora estacional fue un desastre, sobre todo desde el punto de vista social, por eso mantienen el cambio de hora con las estaciones. En los estudios relativos al caso español, no se ha podido concluir que eliminar el cambio de hora estacional vaya a suponer una mejora para la salud, tampoco produciría un cambio significativo desde el punto de vista económico y medioambiental, aunque sobre esto todavía hay abierto un intenso debate. Es por ello por lo que en 2018 el Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad constituyó una comisión de expertos para el estudio de la reforma de la hora oficial española.

La opinión de los expertos sobre el cambio de hora estacional no es unánime ni concluyente. Una parte preferiría mantener el cambio de hora tal y como se viene realizando hasta la fecha, otra optaría por adoptar el horario fijo de invierno atendiendo principalmente a criterios de salud y uso de horas de sol, y también hay expertos favorables a mantener fijo el horario de verano, teniendo en cuenta un previsible impacto negativo en el sector turístico, que representa en torno a un 12% del PIB. No obstante, el resumen del informe de esa comisión es público y concluye: "lo prudente por parte del Gobierno sería mantener el cambio estacional tal y como se ha venido realizando en los últimos 45 años". No obstante, también añade que de cara al futuro se seguirán nutriendo de "argumentación suficientemente consolidada y compartida que nos haga optar por una de las vías".

Tras revisar la literatura científica sobre el cambio de hora estacional y cómo afectaría eliminarla a nuestros usos y costumbres, mi opinión es que el cambio de hora estacional debería mantenerse. Igual que vestimos de una manera en verano y de otra en invierno, el cambio de hora estacional es una adaptación al punto solar en el que nos encontramos en cada estación. Ese es mi punto de vista, sin embargo, tenemos debate para rato.