La Agencia Europea de Medicamentos (EMA) protege y promueve el seguimiento de los medicamentos en la Unión Europea (UE) y el Espacio Económico Europeo (EEE) y su objetivo principal es decidir si un medicamento puede venderse o no en los países miembros de la UE. Para poder comercializar sus productos, cada empresa debe solicitar su autorización que es emitida por la Comisión Europea.

Así, los principales cometidos de la Agencia Europea del Medicamento son: facilitar el desarrollo de los medicamentos y el acceso a ellos, evaluar las solicitudes de autorizaciones de comercialización, hacer un seguimiento de la seguridad de los medicamentos a lo largo de todo su ciclo así como proporcionar información, sobre los mismos, tanto a los médicos y sanitarios como a los propios pacientes.

Este organismo está gestionado por el Consejo de Administración, compuesto por 36 miembros, y cuenta con siete comités científicos y varios grupos de trabajo en los que colaboran expertos de toda Europa.