A través de una nueva investigación se ha podido confirmar uno de los factores que influyen en el envejecimiento prematuro de las células madre. Gracias a las conclusiones derivadas de este estudio podrían comenzar a derivarse nuevas terapias contra enfermedades relacionadas con este tipo de síntomas, como el cáncer o los procesos neurodegenerativos.

Expertos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) han confirmado que el envejecimiento de las células madre se debe a su división celular asimétrica. Durante este proceso es indispensable que las células se dupliquen de forma correcta.

Esto implica que si una minúscula parte de estas células presenta un comportamiento irregular, aumentaría el riesgo de desarrollar distintos tipos de enfermedades que impliquen un envejecimiento prematuro, así como hiperplasia tisular. De esta forma, podría aumentar el tamaño de distintos órganos, la extensión de los tejidos, o podrían aparecer tumores.

Durante esta división asimétrica, como explican los investigadores, los centros organizadores de microtúbulos (MTOC), encargados de distribuir los cromosomas, tanto en la nueva célula recién formada, como en la ya existente; también se duplicaría. No obstante, sendos MTOC presentarían características distintas como edad, tamaño o composición.

Tras esta división, tanto de la célula madre, como del centro organizador de microtúbulos, y tras el reparto distributivo, se observa que determinadas células madre regularían el paso de moléculas dañadas a su célula hija. Y gracias a la investigación desarrollada por el CSIC se ha visto que es posible anticipar qué células desarrollarán este comportamiento. De este modo, también se podría combatir el envejecimiento celular prematuro y mantener la esperanza de vida.