Los incendios siguen siendo una de las asignaturas pendientes en cuanto a la seguridad en España. En 2021, hubo 127.693 incendios, de los cuales 30.783 fueron en edificaciones (inmuebles residenciales, terciarios o de servicios) y, de ellos, 17.347 fueron en viviendas.

La cifra puede parecer poco concreta, pero la magnitud del problema se ve más clara al saber que en 2021 se registraron 48 incendios al día en viviendas en España, según datosde Fundación Mapfre y la Asociación Profesional de Técnicos de Bomberos (APTB).

El peor mes fue diciembre, durante las semanasmás frías del año se incrementan estos sucesos trágicos. Según un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), comienzan en su mayoría en el salón, seguido del dormitorio y, en último lugar, la cocina.

Los grupos más propenso a ser víctimas mortales en incendios son:

  • Personas mayores de 65 años
  • Menores
  • Personas dependientes
  • Personas con patologías cardiacas y/o respiratorias

Causas de incendios en una casa

Las principales causas que provocan incendios en los hogares son las siguientes:

1.Fallos en el sistema eléctrico. Muchos de los fuegos son consecuencia de problemas en la red eléctrica o la mala utilización de enchufes (regletas sobrecargadas, por ejemplo) o los fusibles. Además, una subida anómala de la corriente eléctrica puede ser el desencadenante de las llamas.

2.Estufas, braseros y chimeneas. En el caso de las estufas y braseros, hay que tener cuidado de que no prendan fuego a las cortinas u otra ropa que esté cerca. Casi el 40% de los incendios domésticos con víctimas mortales tienen su origen en estufas o braseros, según los especialistas en sistemas de protección contra incendios Firext. En el caso de las chimeneas, es recomendable el uso de un protector para evitar que las chispas provoquen un fuego. Aunque los aparatos de carbón o leña ahora son menos utilizados, siguen siendo la fuente de calor para gente con escasos recursos o personas de avanzada edad por la fuerza de la costumbre. Hay que asegurarse de que haya una buena ventilación en el lugar donde se utilicen.

3.Velas. Pueden parecer un objeto inofensivo, pero si se encuentran cerca de cosas que prenden fácilmente, como unas cortinas, un sofá o unos cojines, el desastre es inminente.

4.Colillas mal apagadas.

5. Cocina. El calor, junto con la grasa que se acumula en ollas, sartenes y en el extractor, hace que se incrementen las posibilidades de producirse un fuego.

5. Productos inflamables. Hay que tomar muchas precauciones si se almacena gasolina u otros combustibles y líquidos inflamables en el hogar. Un mínimo error puede originar un desastre. (*Datos Mapfre)

Cómo prevenir los incendios en el hogar

La prevención es siempre la mejor manera para luchar contra los incendios. En casa, hay varias medidas que podemos tomar para minimizar los riesgos. Estas son las más destacas, según los expertos:

1. Mantén el buen estado de los equipos electrónicos. Es fundamental que la instalación eléctrica esté actualizada, que tenga toma de tierra y que las regletas, en el caso de utilizarlas, no se sobrecarguen. Evita las reparaciones caseras y manipular la red eléctrica. Trata de no dejar nada que no sea imprescindible enchufado por las noches o cuando no estés en casa.

2.Instala detectores de humo. Es una pequeña inversión que puede salvarte la vida.

3.Extrema la vigilancia del uso de aparatos térmicos como estufas o braseros. Hay que evitar el uso de los braseros con los faldones de las mesas camilla y otros textiles por el riesgo de combustión. También se puede dar el caso de que las mascotas se caigan o enreden las faldillas en los aparatos -ya sean eléctricos o de combustión-, y acaben provocando un incendio.

4.Ten en casa un extintor (homologado).

5.Compra una manta ignífuga para apagar el fuego.

6.Si quieres aumentar el nivel de protección en casa, puedes hacer un tratamiento de ignifugado a los muebles, suelo, materiales textiles, etc., que servirá para que las llamas no se propaguen o lo hagan más lentamente. Además, los gases resultantes de la combustión no son tóxicos, lo que ayuda a salvar vidas humanas.