Los vecinos de un inmueble llaman a la policía alertando sobre la presencia de un individuo que está dando golpes en el portal y que porta un cuchillo de grandes dimensiones.

Los agentes acuden y comprueban que hay varios cristales rotos y manchas de sangre en la puerta. Proceden a su búsqueda en coche. Lo encuentran, y lo retienen. Le confiscan hasta tres cuchillos y observan que tiene heridas con sangre en la mano.

El perseguido dice haberse peleado con la banda de los ‘Ñetas’. Muestra tatuajes que son propios de integrantes de bandas latinas, y comenta que hace un mes mataron a su primo y que, ahora, tratan de matarle a él.