"Asesinato a sangre fría, planificado y cruel", así califica el juez el crimen cometido por dos menores en el municipio de Spalding, en Inglaterra. Los adolescentes, un chico y una chica, acabaron con la vida de una madre y de su hija mientras dormían, a continuación se dieron una ducha, tuvieron sexo y vieron varias películas de la saga 'Crepúsculo'.

La identidad de los asesinos se desconoce, pero fue él quien mató a la madre asestándole varias puñaladas en la garganta. A continuación, agredió a la hija y después la asfixió con una almohada. En el juicio, el adolescente ha declarado que la menor dijo que "le gustaría matar a la mujer" y que le respondió que a él también le gustaría hacerlo.

El brutal crimen ha conmocionado a Gran Bretaña y hasta el propio juez califica lo ocurrido de "completamente excepcional".