Viajestic » Curioso

UN VIAJE A LA EDAD MEDIA

El Castillo de Belmonte

Encargado como vivienda en su ciudad natal por D. Juan Pacheco, Marqués de Villena, en la segunda mitad del Siglo XV, el Castillo de Belmonte, es hoy, uno de los más espectaculares y mejor conservados de toda España.

Publicidad

La historia de nuestro destino está, en parte, ligada a estas piedras que hoy se alzan imponentes en los campos de Castilla.

De estilo gótico-mudéjar, obra del Maestro Hanequín de Bruselas, el Castillo de Belmonte se encuentra ubicado en el monte de San Cristóbal, cerca de Belmonte en Cuenca y es uno de los mayores atractivos turísticos de Castilla La Mancha.

Tiene forma de estrella de 6 puntas con una torre cilíndrica en cada una de ellas y está construido en una sola planta. Con un impresionante patio de armas que es un triángulo equilátero a partir del cual se erige el resto del edificio. En el interior se conservan habitaciones, galerías, la capilla, y varios arcos. Algunos originales y otros fruto de las reformas que se realizaron en el XIX, de estilo neogótico.

Uno de los personajes históricos que habitó el Castillo de Belmonte fue doña Juana, conocida como la Beltraneja, hija de Enrique IV y protagonista de los enfrentamientos políticos que sufrió Castilla en el siglo XV y que acabaron con la entronización de la reina Isabel I, la Católica. De hecho una de las puertas del castillo tiene su nombre, pues cuenta la leyenda que huyó por ella de sus antiguos aliados.

Durante los siglos XVII y XVIII, el castillo, fue abandonado, hasta que años más tarde, una de sus propietarias, Eugenia de Montijo, quien se convirtió en emperatriz de Francia al casarse con Napoleón III, encargó una serie de reformas.

El castillo es privado y organiza visitas de 10h a 14h y de 15h 30 a 18h 30. El horario de tarde se amplía hasta las 19h de febrero a mayo y hasta las 20h 30 de junio a septiembre. Los lunes cierra. Más información, en la Oficina de Turismo de Belmonte, teléfono 967 170 741 o en su página web.

En la actualidad, ya rehabilitado y restaurado, el castillo acoge eventos como recreaciones históricas o bodas. Durante la visita podemos pasar por la torre del homenaje, bajar al patio de armas por una curiosas escalera de caracol y visitar las mazmorras y sótanos. En el interior estancias de la época medieval, con artesonados de madera, decoraciones en ventanas y chimeneas, mobiliario de época, y diversos e interesantes objetos.

En el Castillo también se celebra durante el mes de mayo un curioso y sorprendente Campeonato del Mundo de Combate Medieval, en unas jornadas de recreación histórica que son como un viaje al pasado, una regresión a la vida militar medieval. El castillo cobra vida con actores que nos muestran cómo era la vida en la corte, las batallas, los duelos o los mercados. El Castillo de Belmonte revive con toda su magia. 
Las modalidades de combate en las que se competirá este año serán las de 4 contra 4 y las tres modalidades de duelo: mano y media, espada y escudo, armas de asta. Además se llevará a cabo un combate de gran melé de todos los participantes divididos en dos grupos en cada jornada de competición. Con participantes de hasta nueve comunidades autónomas Madrid, Castilla La Mancha, Castilla León, Aragón, Cataluña, Andalucía, Extremadura, Valencia y Baleares.

Y entre otras cosas, el castillo de Belmonte se ha hecho un pequeño hueco en la historia del cine. Desde que Charlton Heston y Sofía Loren, protagonistas de la película El Cid, rodaron en este escenario natural, el castillo ha sido protagonista de varias películas como “Los señores del acero” de Paul Verhoeven que se rodó casi íntegramente en Belmonte, “Juana la Loca” de Vicente Aranda o “El caballero Don Quijote” de Manuel Gutiérrez Aragón.

Si te apetece una escapada diferente y en familia, el Castillo de Belmonte se encuentra a 170 kilómetros de Madrid, una distancia que merece la pena recorrer para conocer una histórica fortaleza en la que revivir el pasado. Desde sus murallas, que se pueden recorrer o desde sus torreones a los que se puede subir, podemos disfrutar y sentir como soldados de guardia oteando el horizonte, con excepcionales vistas de Belmonte y de los paisajes castellanos. Y en un gran panel aparecen los principales monumentos que se pueden ver desde lo alto, como la Colegiata de San Bartolomé, el antiguo alcázar del Infante Don Juan Manuel actualmente en reconstrucción, el hospital de San Andrés, el convento de las madres Concepcionistas, la Plaza del Pilar, el convento de los Trinitarios y la muralla que desde el castillo abraza el casco antiguo de Belmonte. Un viaje a la Edad Media ideal para hacerlo en familia.


Publicidad