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QUIEREN QUE SE INYECTE EN LA SANGRE EN UN FUTURO

Crean una cámara de 0,12 mm que podría navegar por el interior del cuerpo humano

Los móviles del mañana, o la investigación en el interior del cuerpo humano, podrían recibir de la Universidad de Stuttgart una inmejorable noticia: allí, un grupo de investigadores han logrado crear una cámara más pequeña que un grano de sal -de solo 0,12 milímetros de ancho- gracias a la impresión 3D.

Imagen hecha con la cámara

Imagen hecha con la cámara Universidad de Stuttgart

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A día de hoy, ya parece todo un milagro tecnológico que cualquier teléfono móvil tenga no una, sino dos cámaras de fotos diminutas incorporadas para que hagamos selfies y vayamos cazando pokemones por la calle con la mejor calidad posible. Por si fuera poco, y por si la cámara más pequeña del mundo (de 1,2 milímetros) no fuera lo suficientemente minúscula, ya hay quien ha hecho una aún más pequeña.

Se trata de un grupo de estudiantes de doctorado de la alemana Universidad de Stugttgart que ha logrado crear una cámara aún más diminuta que un simple grano de sal. En concreto, un dispositivo de solo 0,12 milímetros de grosor. Todo, gracias a la tecnología de impresión 3D.

Si bien el equipo fue consciente en todo momento de que las técnicas de fabricación actuales no permiten crear lentes tan pequeñas como la que consiguieron desarrollar finalmente, su esperanza siempre se mantuvo en la fabricación aditiva, nombre con el que también se conoce a la impresión 3D.

De hecho, con ella no solo fue posible crear una cámara de semejante tamaño sino que, como explican los directores del equipo, Timo Gissibl y Simon Thiele, el proceso de diseño y fabricación solo lleva un par de horas.

Si la simple fabricación de la lente que lleva nuestro móvil en la cámara frontal ya parece todo un logro tecnológico, lo sucedido en la Universidad de Stuttgart no es para menos. No en vano, no se trata de la creación de una lente, sino de tres lentes diferentes unidas entre sí por fibra óptica.

No obstante, no se trata de fibra óptica como la que llega ya a los hogares llevando internet y televisión por cable, sino una de tan solo el doble de ancho de un cabello humano.

Imagen de la cámara

NAVEGAR POR LA SANGRE

Más allá de tratarse de la cámara que acompañará en el futuro a los más modernos teléfonos móviles, lo cierto es que la intención de los investigadores alemanes pasa por desarrollar la cámara que sea utilizada en hospitales y centros médicos para navegar por nuestra sangre en busca de enfermedades.

Su grosor permite que esta microscópica cámara se inyecte en el cuerpo a través de una jeringuilla para transmitir información útil a los médicos de cara a distintos diagnósticos. Además, si ha sido pensada para revisar la maquinaria humana, la cámara también podría ser utilizada para inspeccionar el estado de maquinaria industrial con conductos hasta ahora inaccesibles.

Precisamente por los lugares en los que se espera que sea utilizada la cámara, donde las condiciones de luz brillarán, paradójicamente, por su ausencia, el invento creado en la Universidad de Stuttgart incorpora un pequeño LED cuya función no será sino dar luz en los recovecos de nuestro cuerpo o de las máquinas en las que la cámara deba investigar.

No obstante, los investigadores también tuvieron en cuenta a los usuarios habituales de las cámaras fotográficas y desarrollaron otro modelo siguiendo el mismo método con, eso sí, un sensor algo más tradicional.

ESPIONAJE CON DRONES

El resultado no fue sino una cámara pequeña que podría ser utilizada como herramienta de espionaje, para dotar de visión a los robots o incluso equipar de cámara a drones del tamaño de un abejorro.

Probablemente, lo que más sorprenda de este sistema creado por el grupo de estudiantes de doctorado es, efectivamente, el tiempo en el que podría ser fabricada una lente de semejante tamaño.

“El tiempo de la idea, el diseño de la lente, el modelo, los acabados y la impresión en 3D llevaría menos de un día”, explica el profesor universitario Harald Giessen.

De esta forma, si bien los investigadores no esperan que sus cámaras sean una realidad hasta dentro de un par de años, sí que tienen planeado ser capaces de crear un sinfín de cámaras microscópicas en poco tiempo, lo que desean que suponga toda una revolución, como ya lo fue el diseño asistido por ordenador para la ingeniería mecánica años atrás.

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