Esperanza Aguirre hablaba alto y claro. Recibía un premio, pero guardaba un castigo. ¿Un nuevo dardo envenenado? Lo cierto es que, una vez más, su filosofía le viene como anillo al dedo: "Me gusta navegar con viento contrario".
La que un día fuera presidenta de la Comunidad Madrileña, tiene un nuevo eslogan. "Sí hay alternativa", así titulaba su mensaje esperanzador, y esta vez, el rapapolvo va dirigido contra su propio partido: "Ante la mala noticia sobre las previsiones macroeconómicas anunciadas en el último Consejo de Ministros, lo peor que puede pasar es que los ciudadanos caigan en una actitud fatalista. Y es lo peor porque sí hay alternativa".
Parece ser que sus intenciones de permanecer en la segunda fila de la política podrían estar llegando a su fin. ¿Dardos envenenados con una diana concreta? Lo cierto es que fue ella misma quien matizó su retirada: "Abandono la primera línea, no la política". Y estas últimas declaraciones podrían ratificarlo.
Algunas voces apuntan a diversas teorías. Manuel Rico cree que "su comportamiento no es el de alguien que quiera dejar la política". Antonio Martín Beaumont está convencido de que "Esperanza Aguirre puede tener algunas aspiraciones".
¿De qué aspiraciones estaríamos hablando? "Si no mejoran las cosas, se puede quebrar la mayoría absoluta del PP en el Congreso de los Diputados y hay muchos diputados que creen en la alternativa de Aguirre".
¿Quiere Esperanza Aguirre hacerse con la dirección del partido? Su discurso es claro: "Sí hay alternativa, y está en el espíritu del programa con el que el PP se presentó a las Elecciones en noviembre de 2011." Una idea, que podría contar con apoyos dentro del partido.
Otra teoría apunta a que Aguirre podría ser la portavoz de un grupo discordante dentro del PP. Y si hablamos de discordia, Aguirre la ha tenido, y dentro de su propio partido. Son muchos los testigos que, de puertas para dentro, narran la tensión vivida en la última reunión con la cúpula del partido en Madrid. Tensión generada en torno a tres líderes. El motivo, sus respectivas gestiones. La presidenta del PP de Madrid arremete contra la ministra Ana Mato, ataca a Cospedal y se enfrenta a Ana Botella en una reunión interna del partido.
"La dimisión es una cuestión personal, es la Ministra de Sanidad la que lo tiene que reflexionar". Con Cospedal por su gestión del caso Bárcenas: Calcule usted la preocupación que tenemos". Un rifi-rafe con precedentes: la ley del tabaco. La entonces presidenta de la Comunidad de Madrid se tiró un órdago: "Evidentemente la prohibición de fumar se cambiará", respondido de inmediado por María Dolores de Cospedal: "El PP no se ha planteado de ninguna manera cambiar la ley antitabaco".
Y por último con Ana Botella, por su gestión municipal en la crisis del Madrid Arena. Una supuesta pelea que Aguirre llegó a comentar en twitter: "Ana, di la verdad: ¿te regañé yo a ti o tu a mí?" La cúpula del PP se pregunta: "¿A quién va dirigido el 'sí hay alternativa'?"
Por el momento, el mensaje es claro: "Pueden contar conmigo". Pero, de ser cierto, ¿será ella la que no quiera contar con ellos?