Rafael, fue a preguntarle la lección a su hija de 10 años. Al día siguiente tenía exámen y lo que se encontró en su libro de Castellano de 5º de primaria es una lección en la que se explica el uso del lenguaje a través del teléfono móvil. Por ejemplo, se dice que se escribe con un sólo signo de interrogación y que no se utilizan los acentos. Es más insisten en que la regla de oro todo lo que se entiende sirve.
Indignado subió la fotografía a las redes sociales. Este padre, catedrático de derecho internacional, insiste en que, aunque se utilice el teléfono móvil, no hay que prescindir de las normas ortográficas, de puntuación, ni acentos. Por otro lado desde la editorial del polémico libro, nos aseguran que las imágenes que tomó Rafael están sacadas de contexto, y que es un subtema de un capítulo que enseña las abreviaturas. Sin embargo muchos consideran que no es necesario que los escolares aprendan este tipo de lenguaje, que se basa, en escribir mal.
En muchas ocasiones los escolares acaban haciendo de estas abreviaturas un uso cotidiano. Profesores de secundaria se las encuentran habitualmente en sus exámenes."Símobolos como el 'por', el 'también' este tipo de simbología que ya están apareciendo en sus propios exámenes. Si se concentran en el exámen ese tipo de simbología le sale inconscientemente porque ya forman parte de toda su médula de pensamiento" dice José Quintanal, pedagogo y profesor universitario. El debate está abierto: ¿son sólo abreviaturas o un golpe bajo a la lengua de Cervantes?.
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